12.16.2013

Mass media de titularidad pública y debate actual

por Rubén Tamboleo (@tamboleo)

Un modelo de televisión de titularidad pública deberá basarse en dos premisas básicas:

1. Constituirse en una herramienta adecuada para servir de mecanismo de comunicación entre los representantes y los representados del sistema político de su sociedad respectiva, ayudando a entender a los electores las decisiones tomadas por los electos (por el pueblo o una cámara), para que éstos puedan apoyarlas o censurarlas colaborando así a construir sus decisiones para posteriores procesos políticos (si en algún caso participa en otro tipo de proceso político aparte del electoral) en los que opte por tomar parte. Como media unidireccional tendrá primero que seleccionar los contenidos más adecuados, que realmente sean objeto de noticia, y una vez hecho esto, fomentar la imparcialidad y facilitar la comprensión de sus mensajes por parte de todo tipo de públicos, especialmente de aquellos que no tienen acceso a otros soportes de noticias. 

2. Contar con un presupuesto de ingresos adecuado a la sociedad para la que trabaja, y moderar el gasto para no generar una deuda que sea posteriormente la soga de la propia organización. Si ha optado por prescindir de ingresos por publicidad, esto deberá ser un punto de especial atención. 

Casi huelga a mencionar otras funciones como la transmisión de la cultura que por su bajo interés las televisiones comerciales no harán. 

El ejemplo paradigmático de modelo de televisión pública racional, proporcionado y periodístico en el más amplio y bienintencionado sentido del adjetivo es la British Broadcasting Corporation; cualquiera puede llegar al Reino Unido y probar a sintonizar el canal 81 en la mayoría de los televisores, con lo que se encontrará viendo el canal Parlamentario que emite en directo y diferido sobre las dos cámaras del Parlamento, las 3 regionales y el Supranacional que compartimos. Mientras que en España podemos solazarnos con Teledeporte, y hemos podido gozar del nacimiento de una tendencia de televisión como han sido las relaciones de bragueta de gente más o menos desconocida, que tuvo su alborada en la “Tómbola” nacida en Canal Nueve para después reproducirse en Telemadrid dados sus éxitos de audiencia. 

A modo de conclusión, y tras el debate opinativo suscitado las pasadas semanas por la decisión del Presidente de la Generalidad valenciana de cerrar Canal Nueve, hemos constatado como el citado canal ni servía como herramienta para la rendición de cuentas en su ámbito político de la respectiva comunidad autónoma (su mayor función era la propagandística con inverosímiles noticiarios y una programación al servicio del partido político de turno en el poder, como confirmaron los propios trabajadores solo una vez que el apagón era inminente e inevitable), y tenía, como se puede comprobar en las cifras, un gasto desproporcionado en cualquier etapa, y a más a más, inapropiado para nuestros tiempos de gestión de la escasez. Por ello, cualquier canal de titularidad pública que no sirva ni como herramienta de rendición de cuentas ni tenga un gasto proporcionado de recursos, y especialmente si se ha enconado en una serie de problemáticas organizativas de difícil solución, lo mejor que se podrá hacer con él, es ofrecer una última emisión a modo de resumen para nostálgicos y cerrar, como se hizo en la República Helénica hace escasos meses.


Liquidada por agotamiento

por Raúl Soriano Girón (@rulosoriano). 
Co-editor del blog “Condición sine qua non”. http://condicionsinequanon2014.wordpress.com/

El caso de RTVV ha sido la crónica de una muerte anunciada. El seguimiento del manual, punto por punto, de la utilización de un medio de información público por y para un partido político. Durante 18 años de mandato popular en la Comunidad Valenciana hemos acudido a una relación inversamente proporcional entre las variables audiencia y deuda. Mientras la deuda se disparaba, gracias a las contrataciones a dedo y la adjudicación arbitraria de jugosos contratos para empresas afines, Gürtel entre otros, la audiencia iba cayendo sin freno debido a la manipulación informativa y al ostracismo en que habían quedado amplios sectores de la sociedad civil y política. 

Con una deuda de 1200 millones de euros y una plantilla de 1600 trabajadores, tras la anulación del ERE por parte del TSJCV, el Consell decidió que tenía que liquidar el ente. Tras muchas protestas y una sociedad valenciana unida contra el cierre, finalmente el día 27 se produjo el fundido a negro de RTVV. 

Son básicamente económicos y de priorización del gasto público para sectores fundamentales (sanidad y educación) los aducidos por el President Fabra para justificar la decisión, lo cual no deja de ser curioso si hacemos memoria de a qué se han dedicado grandes cantidades en los últimos tiempos en la Comunidad Valenciana (Fórmula 1, America’s Cup, Ciudad de las Artes, etc.) 

Sin duda el modelo de televisión de partido ya no resultaba rentable electoralmente al PP, dado que la media de audiencia estaba en el 3%. Pero desde que se anunciase el cierre inminente y, con la toma de la línea informativa por parte de los trabajadores, se recuperaron niveles de audiencia superiores al 10%. La RTVV había pasado del patrimonialismo político a su papel de servicio público que jamás debería haber perdido. Los dirigentes de turno deberían comprender que los ciudadanos queremos una televisión pública de calidad, fiable y que haga de nuestra sociedad un lugar más crítico y mejor informado. 

En este caso, además, RTVV supone un canal de promoción indispensable de la cultura y lengua propias del territorio valenciano, siendo este el único medio de difusión de las mismas en todo el Estado. 

En conclusión, otro modelo de gestión de las radios y televisiones públicas, como ya vimos en la anterior etapa de RTVE, en la que se le galardonó con el premio a mejor informativo del mundo durante dos años consecutivos, es posible. Lejos del control de los partidos políticos que en demasiadas ocasiones conciben un servicio público como este con un instrumento propagandístico a cargo del erario público. 




El cierre de RTVV: un ataque al autogobierno del pueblo valenciano desde dentro


por José Luis Sola Marín (@jl_solam)

Partimos del hecho de que los medios de comunicación son claves para la democracia y el ejercicio de los derechos fundamentales, sin éstos la libertad de expresión y el derecho a recibir información son inexistentes.

En segundo lugar, es necesario una televisión pública puesto que es la única que garantiza programación de servicio público, las empresas del sector audiovisual privadas no ofrecen este tipo de programación porque no genera beneficio. ¿Es necesaria una televisión autonómica? Sí, nuestro país dispone de regiones con una riqueza cultural y lingüística que las diferencia unas de otras, para el pueblo valenciano Canal9 supuso la visualización del autogobierno y un medio para articular y vertebrar el territorio, además de ser el instrumento que ha permitido la protección y difusión del valenciano como lengua cooficial, objetivos que las cadenas privadas no pueden cumplir.

Se han aducido motivos económicos para proceder al cierre de Canal9 pero lo que caracteriza un servicio público es la rentabilidad social, siendo necesario valorar y decidir qué forma parte del servicio público, no forma parte de éste la compra de derechos de fútbol, ni la emisión de programación de bajo perfil como Tómbola (en castellano), ni el ser una oficina de empleo donde contratar a personal sin pruebas que garantizaran los principios constitucionales de mérito y capacidad. 

Otro de las premisas que debe cumplir un servicio público es la de imparcialidad, que se consigue no admitiendo ninguna injerencia por parte de los poderes políticos, una televisión pública deber ser ideológicamente neutral y dar cabida a todos los sectores de la sociedad, por tanto, no debe permitirse bajo ningún concepto la manipulación ni las coacciones a trabajadores que denuncien los excesos cometidos. 

Desde el punto de vista social, el cierre de Canal9 ha herido la identidad del pueblo valenciano, que ha supuesto un ataque a los derechos lingüísticos y constitucionales de los valencianos. Desde el punto de vista político el cierre se ha gestionado catastróficamente, de forma unilateral, sin consenso, comunicándose primero a otros medios, con reuniones secretas, procedimientos sumarísimos, falta de transparencia, con intención de cortar la emisión sin que nadie se enterara, sin que los trabajadores pudieran despedirse de la audiencia y todo como reacción a la anulación por parte del TSJCV del ERE llevado a cabo por el Consell.

Políticamente nadie ha asumido responsabilidades derivándose ésta a sindicatos (representantes de los trabajadores) y a partidos políticos de la oposición cuando el Consell es el máximo responsable de la Administración Autonómica, de la que canal9 era parte, y quien ponía y quitaba directores, silenciando a la oposición y premiando con ascensos a quienes hacían de censores. Judicialmente, quedan muchos flecos abiertos como determinar las responsabilidades patrimoniales, y si se ha seguido la legalidad en el procedimiento, tanto en la forma como en el fondo o qué sucederá si el cierre es recurrido y anulado. El final de RTVV todavía no está escrito.


¿Por qué los medios de comunicación públicos son importantes para la democracia?

por Jorge Juan Morante (@jjmorante)

Los medios de comunicación tienen un papel muy importante en la democracia que es el de ejercer como un actor político importante que tiene que ayudar a crear una masa crítica en la ciudadanía para el establecimiento de una democracia deliberativa que complemente a la representativa, ofreciendo una realidad social del entorno que ayude en la participación y deliberación de los ciudadanos pero también ayudando a los gobiernos a tomar la mejor decisión a partir de una visión real de la situación.

Sin embargo, los medios de comunicación privados por su dependencia mercantilista hacen uso de las espectacularidades y escándalos gratuitos para atraer a su audiencia y satisfacer los intereses de sus anunciantes, alterando la realidad de la sociedad actual.

Por ello es fundamental la existencia de medios de comunicación públicos para ejercer ese papel, ya que, al depender más de la financiación pública, no están sujetos al mercado pero deben ser dotados de una serie de garantías que les permitan actuar con independencia de los gobiernos de turno, como una mayor participación de los trabajadores del medio en la dirección y que el Presidente del medio sea elegido por consenso entre profesionales del medio.


La importancia de los medios de comunicación en las democracias modernas

por Rodrigo del Olmo (@rodrigodof)

Resulta complicado resumir en la brevedad de quinientas palabras la dinámica, multiforme y plurívoca relación entre los medios de comunicación y las democracias modernas. Siguiendo a Goede podemos definir a los medios como “los canales de comunicación a través de los cuales noticias, entretenimiento, educación, datos o mensajes publicitarios son diseminados entre el público”. Las principales funciones de los medios son: informar a los ciudadanos, criticar situaciones y acontecimientos en la sociedad, expresar opiniones y permitir a otros expresar las suyas en diferentes materias, entretener, educar a los ciudadanos y hacer negocio con la explotación comercial del propio medio. Pudiendo ser conflictivas entre sí las diferentes funciones enumeradas (Goede, 2010, p. 115)

Muchos son los autores que consideran que los medios juegan un papel fundamental tanto como vigilantes de la esfera pública definida por Habermas como dentro del mecanismo de pesos y contrapesos del sistema político. En 1975 Kevin Philips introdujo el concepto de mediacracia para describir el hecho de que en una sociedad democrática aquellos que controlan a los medios controlan indirectamente a la sociedad erigiéndose como un actor, más o menos colectivo en función de la pluralidad del panorama mediático a considerar, de trascendental importancia en el gobierno del Estado ya que los políticos suelen prestar atención a determinados asuntos y establecer sus agendas y prioridades más en función de la cobertura mediática que del sentido común, la ideología o la racionalidad. Así, si los medios están en manos de corporaciones o son financiados por ellas, las corporaciones poseen un formidable mecanismo de influencia en el sistema.

Si nos centramos en el caso español, González y Olmeda sitúan al modelo de relaciones entre medios y política en España dentro del denominadopluralismo polarizado o mediterráneo cuyas características son:

- Escaso desarrollo histórico del mercado periodístico reforzado por la ausencia de libertad de prensa durante la dictadura lo que tiene como consecuencia una prensa dirigida fundamentalmente por las élites.

- Altos niveles de paralelismo político siendo éste entendido como la relación establecida entre periodistas y clase política convirtiendo en muchos casos a los medios como el referente ideológico del partido afín, sin pluralismo interno y completamente predecibles en su cobertura y línea editorial.

- Escasa profesionalidad y autonomía de los periodistas debido a la debilidad de las normas deontológicas profesionales y a la parcialidad y carencia de poder real de las asociaciones profesionales.

- Intervención del Estado mediante la AGE y las CCAA en los medios tanto de forma directa en el caso de propiedad de cadenas públicas y la Agencia EFE proveedora de información a otros medios, como de forma indirecta mediante el reparto del espectro radiofónico y la concesión de licencias audiovisuales. 

Como consecuencia práctica de este modelo apreciamos el predominio de la cobertura negativa, es decir, una escasa proporción de notas favorables a alguno de los actores en relación a las desfavorables, tendiendo los medios a ser críticos solo con los antagonistas viéndose, al tiempo, diluida su función de control al darse por descontados los ataques al adversario en lugar de la argumentación y debate lo que contribuye a definir el escenario de polarización mediática del caso español. (González & Olmeda, 2012)

Bibliografía

Goede, M., 2010. Media, Democracy and Governance. In: J. i. ’. V. Roeland, ed. Knowledge Democracy. Heidelberg: Springer, pp. 112-124.

González, J. J. & Olmeda, J. A., 2012. El sistema mediático en tiempos de Rodríguez Zapatero: un bucle melancólico. In: C. Colino & R. Cotarelo, eds.España en Crisis. Balance de la segunda legislatura de Rodríguez Zapatero. Valencia: TIRANT HUMANIDADES, pp. 311-330.

Roeland, J. i. ’. V., 2010. Knowledge Democracy. Heidelberg: Springer.



Medios políticos y política mediática

por Santiago Fernández

Decía el profesor Pablo Iglesias hace poco más de un año que “la gente cree que se limita en los partidos o en los colectivos políticos, y no es verdad: la gente milita en los medios de comunicación” [1]. Planteaba así que, en los últimos tiempos, parece haberse dado una redirección en la construcción de los discursos políticos que ha dado como resultado el paso de la militancia en organizaciones políticas a la militancia mediática. A estas alturas, a nadie se le escapa que los meetings y conferencias políticas ya no consiguen atraer la audiencia que hoy puede conseguir un programa de radio o televisión. Como consecuencia, el discurso político elaborado desde éste se proyecta hacia una audiencia potencial frente a la que poco pueden hacer los asesores políticos. Pero existen otros motivos por los que el apego político a los medios de comunicación es mucho mayor que a las organizaciones políticas. 

En primer lugar, los medios de comunicación son empresas con una estructura, un funcionamiento y unos intereses idénticos a los de cualquier otra empresa dedicada a la producción y venta de bienes de consumo. Como tal, necesita obtener unos beneficios con los que poder seguir adelante. Pero al manejar un bien público tan importante como es la información la cosa se complica, pues es difícil ver con nitidez la línea que separa la libertad de prensa de la libertad de empresa. Se ha de dar información veraz y contrastada, pero el contenido debe ir dentro de una forma que continúe permitiendo sostener una audiencia determinada. Un hecho se puede relatar de diferentes maneras, porque lo que se quiere es que su audiencia siga siendo fiel, ¿no recuerda esto un poco a la fidelidad electoral? Además, tanto los partidos políticos como las grandes empresas de comunicación mantienen importantes líneas de financiación y crédito con grandes corporaciones bancarias. Producir unos bienes de consumo que sean contraproducentes a los intereses de los acreedores tampoco es, como se sabe, beneficioso para una empresa. Por tanto, nos hallamos ante una pregunta que, trescientos años después de la edición de los primeros diarios en Londres, sigue sin respuesta ¿es más democrática la información si se encuentra mercantilizada? 

En segundo lugar, desde los años 30 –cuando la significación política, como ha dejado claro Santos Juliá [2], era algo explícito en toda la intelectualidad política española–, el apoliticismo ha sido un recurso muy extendido entre la ciudadanía española como forma de desentenderse de las luchas políticas tradicionales (lucha de clases, identitarias, de género, etc.). Durante el franquismo, hacer la política contra los principios del régimen no sólo estaba explícitamente prohibida por la ley de fueros, sino que la propia política oficial del régimen fue disfrazada de apoliticismo empezando por el propio jefe de Estado –“haga usted como yo y no se meta en política”–. La cultura de la transición dibujó una idea de la democracia como un fin en lugar de cómo un medio, algo parecido a un artefacto político que funcionaría bien per sé y del que no habría de preocuparse mucho por su mantenimiento una vez estuviese puesto en pié. Esto permitió que el proceso de apoliticismo continuase tras la pausa de los años setenta, identificándose lo político con los políticos –los cuales, y esto es importante, han ido bajando sin cesar en el ranking de instituciones con mayor apoyo elaborado por el CIS–. De este modo y salvo una breve excepción durante los años setenta, la política ha estado prohibida durante cuarenta años y desaconsejada durante otros cuarenta. El resultado es que quienes se han dedicado a la actividad política han sabido perfectamente aplicar la máxima de Zlavoj Zizek (aquella que dice que no hay mejor operación política que hacer que algo parezca a político). En este contexto, los grandes medios de comunicación han ido tomando posiciones desde la que elaborar unos discursos políticos vestidos de apoliticismo y “sentido común”, un traje por el que no pocos ciudadanos comunes se han sentido atraídos al sentirse identificados en su “política apolítica”. El resultado es que uno cree ser apolítico por consumir determinados productos mediáticos que no son menos políticos por el mero hecho de no reconocerse como tales. 

Mercantilización de la información y política del apoliticismo son solamente dos de las muchas razones que ayudan a entender el fenómeno de la militancia mediática en nuestro país. Sin embargo, son los profesionales del periodismo, la información y la comunicación quienes en mejor situación se encuentran para poder entender este fenómeno y explicarlo también a la ciudadanía para así, entre todos, formar un pensamiento crítico que nos indique más o menos y en medio de tanta perplejidad, dónde nos encontramos y poder tomar referencias. Porque al igual que economistas y politólogos tienen la obligación de intentar explicar qué está pasando en estos tiempos de crisis perpetua, también lo están los periodistas. 

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[1] http://www.youtube.com/watch?v=ddxvO6kVMwQ

[2] Santos Juliá, Historias de las dos Españas, Taurus, Madrid, 2005



12.02.2013

En los últimos años se está produciendo en España una metamorfosis del espectro mediático público.

Tras las medidas de recorte y los despidos masivos en medios de comunicación públicos, se ha producido el cierre de radiotelevisiones públicas, como RTV de Mallorca o la más famosa RTV Valenciana.
televisiones publicas y EREs RTVV


El politólogo José Luis Sola nos sugirió que abriésemos un Call for articles sobre este asunto, en el que aportar una visión más científica, más allá del debate mayoritario y opinativo. Desde +Politología queremos agradecer su interesante sugerencia, y aquí abrimos el plazo para presentar vuestros artículos.

Bases
Los artículos no podrán exceder de 500 palabras (bibliografía no incluida, si se considera oportuno). El plazo de envío de artículos comienza el 03 de diciembre y finaliza el día 10 de diciembre a las 23:59h.

Período de entrega ampliado hasta el 13 de diciembre a las 23:59h (hora española).

Todos los artículos recibidos se publicarán el día 12 de diciembre. Pueden ser artículos inéditos o ya publicados en otros medios, siempre que cumplan con los requisitos de extensión.

Quedarán excluídos aquellos artículos difamatorios, que contengan expresiones inapropiadas e insultos, así como los meramente publicitarios. 

Esperamos vuestros artículos en info@maspolitologia.com y aprovechamos para desearos un feliz puente de la Constitución a todos. 

10.22.2013

Desde el Departamento de Ciencia Política y de la Administración de la Universidad de Granada (UGR), nos han hecho llegar la publicación del libro "Medios y elecciones en España: la cobertura televisiva de la campaña de 2008"

Publicada por la Editorial Universidad de Granada, esta obra recoge en 7 capítulos los aspectos más importantes de la comunicación en las elecciones generales de 2008 en España, de la mano de profesores y expertos en Ciencias Políticas de la UGR.

Medios y elecciones en españa


El índice es el siguiente:

1. Las campañas televisadas en España: una introducción. Óscar G. Luengo

2. La encuesta preelectoral del CIS. Manuel Trenzado

3. La lucha por la agenda de campaña: la crisis que nunca existió. Luis Arboledas

4. Los vídeos electorales. Encarnación Hidalgo Tenorio

5. Los debates electorales en televisión. Javier G. Marín

6. El terrorismo en campaña. Óscar G. Luengo

7. Los resultados de las elecciones. Giselle G. Hípola



¡Esperamos vuestras reseñas en +Politología!

10.01.2013

Tras el XI Congreso de la AECPA, compartimos los papers que nos enviaron sus participantes, a quienes agradecemos la colaboración:

Santiago Fernández Fernández-Caballero (Universidad Complutense de Madrid). Es Licenciado en Ciencias Políticas y de la Administración y Máster en Ciencia Política (Universidad Complutense de Madrid).
Cataluña: de etnia a nación. Un estudio etnosimbólico sobre los orígenes del nacionalismo catalán (1859-1922)

Abstract: El etnosimbolismo es una aproximación cultural sobre el fenómeno de la nación y el nacionalismo que pretende rellenar ciertas grietas observadas dentro del paradigma modernista, si bien no cuestiona tanto su dimensión teórica como sus limitaciones empíricas. El marco teórico que engloba este análisis es el enfoque etnosimbólico de Anthony D. Smith, quien plantea que tanto el legado cultural de las comunidades étnicas premodernas como el uso de éste por parte de ciertos sectores sociales contemporáneos es fundamental para entender la nación como producto de una identidad cultural colectiva y el nacionalismo como movimiento, doctrina cultural y lenguaje, así como para comprender la fuerza o debilidad con la que su propuesta identitaria arraiga en la mayoría geográfica y social de una comunidad.

Este estudio histórico se inicia con un repaso a la formación de Cataluña como entidad política y la dimensión étnica de la identidad catalana durante la Edad Moderna, con el fin de observar si se cumplen los requisitos necesarios a la hora de definir a una comunidad étnica como tal: nombre colectivo, mitos de origen común, recuerdos compartidos, elementos culturales distintivos, asociación a una tierra específica y sentido de solidaidad interclasista. Seguidamente, se analiza la incidencia identitaria que tuvieron las transformaciones económicas, sociales y políticas de la Cataluña de los siglos XVIII y XIX, para así poder explicar el paso de una identidad étnica precontemporánea a una identidad nacional contemporánea (1859-1922); una transformación fruto de un activismo cultural y político que nacionalizó la "etnohistoria" catalana haciendo uso de la lengua vernácula como depósito cultural (mitos, símbolos, héroes, valores, edades doradas, lugares sagrados).

9.20.2013

Te presentamos el Storify del XI Congreso de la AECPA, con todos los tweets publicados hasta el día de hoy.

Como sabéis, las redes sociales son muy importantes para la transmisión del conocimiento, y para compartir ponencias. Es por ello que hemos recogido todos los tweets que utilizaban el hashtag #AECPA11, para que puedas leerlos de una forma cómoda y sencilla.

Esperamos vuestros artículos sobre el Congreso, y los papers de las ponencias de aquellos que hayáis participado. Consulta toda la info aquí.





9.11.2013

La Asociación Española de Ciencia Política y de la Administración (AECPA) celebra su XI Congreso entre los días 18-20 de septiembre, como podéis comprobar en el apartado Congresos de la web de MasPolitologia. 

Comprometidos con la difusión del trabajo y la visibilidad de los politólogos, estamos dando difusión del Congreso a través de nuestras redes sociales, pero queremos ir un paso más allá. Como siempre, queremos que sean los propios politólogos, con nombres y apellidos, quienes aporten sus reflexiones, recomendaciones y conclusiones. 

Congreso AECPA Ciencia Politica 2013

Por eso abrimos +Blog a aquellos participantes del XI Congreso de la AECPA

Queremos difundir vuestras reseñas al Congreso, pero también promocionar a aquellos investigadores o profesores que presenten ponencias, a través del apartado +Papers.

Desde el día 21 de septiembre y hasta el 01 de octubre podrán enviarse los artículos sobre el Congreso de la AECPA, con una extensión máxima de 500 palabras a la dirección info@maspolitologia.com.

Aquellos interesados en difundir sus papers presentados en Sevilla, podrán enviar en el mismo plazo de tiempo un e-mail con el nombre y titulación académica, el título del paper, un resumen de 200 palabras y el enlace al documento (ver condiciones de publicación aquí).

Esperamos que el Congreso de Ciencia Política sea todo un éxito, y estaremos encantados de difundir vuestras impresiones y trabajos desde +Politología.



8.02.2013

+Politologia: trabajo para politólogos y sociólogos


Como sabes, en +Politologia tratamos de mejorar la visibilidad y trabajo de politólogos y sociólogos. Es por ello que hemos abierto una lista de correo por provincias, para que recibas en tu mail las ofertas específicas que las empresas nos envíen.

Tus datos serán tratados de acuerdo con la LOPD y en ningún caso recibirás ofertas comerciales ni spam. Podrás darte de baja en cualquier momento, o contactar con nosotros por via mail.

Pincha en la imagen para ir a www.maspolitologia.com, donde encontrarás el enlace para suscribirte.

Mas Politologia empleo politologos y sociologos

Asimismo, animamos a las empresas que busquen a politólogos y sociólogos, a que nos envíen sus ofertas. Desde +Politologia las enviaremos de forma completamente gratuita.

7.26.2013

+Politologia, la web de recursos para politólogos y sociólogos

Seis meses después del estreno de la web, podemos afirmar que +Politologia ha superado todas las expectativas. Creado como una web de recursos para estudiantes y profesionales de la Ciencia Política y de la Sociología, el proyecto de +Politologia ha crecido en alcance, en contenidos y en bidireccionalidad.


Las redes sociales, mucho más que contenido bidireccional

Desde el principio del proyecto, en +Politologia creímos en la interacción directa a través de las redes sociales, y apostamos por Facebook, Twitter y LinkedIn. En los últimos meses también hemos aumentado la presencia en Google+.

crecimiento seguidores Facebook +Politologia

El número de seguidores en Facebook ha crecido de manera espectacular, creciendo hasta superar los 650 perfiles conectados, que además de “likes”, interactúan y aportan comentarios muy interesantes.

El carácter inmediato de Twitter ha favorecido la difusión de nuestros contenidos, y de vuestros artículos, aumentando hasta casi 2.000 seguidores, cifra que esperamos superar en los próximos días.

Por su parte, LinkedIn ha sido una apuesta por mejorar las condiciones y la visibilidad de los politólogos y sociólogos con perfil profesional en esa red. Por ello hemos favorecido que los usuarios creasen debates interesantes y beneficiosos de cara a los reclutadores de empleo, aunque algún usuario utilizaba el grupo para hacer spam y lamentablemente hubo que moderar su participación.

Incremento seguidores Twitter +Politologia
Crecimiento de seguidores en Twitter (Fuente: TwitterCounter.com)

+Blog: Ciencia Política, Ciencias Políticas, Politología

Como todos sabéis, el debate en nuestra profesión se encuentra en el mismo nombre de la disciplina. Es por ello que quisimos dar voz desde el primer día a los politólogos y sociólogos, para que dieran su visión de la profesión y qué nombre utilizan para nombrar la profesión. Así, la primera publicación del Blog sería Definiciones de Politología, escritas por politólogos y sociólogos.

Dado el desconocimiento de la profesión, también quisimos publicar periódicamente las efemérides de los autores más importantes, que difundimos por las redes sociales y que han tenido una acogida muy buena.

Difusión de tus publicaciones

Creímos que una de las mejores formas de combinar la publicación de artículos colaborativos con la reputación online de los participantes, era recoger sus blogs en el Directorio de +Blog, con la intención de concentrar en un índice las publicaciones de los miembros de la comunidad politológica.

Para ir un poco más allá en la mejora de la reputación online, habilitamos una nueva sección, que busca difundir los trabajos académicos de politólogos y sociólogos, llamada “+Papers”. El usuario solo tiene que subir su trabajo a un servidor y enviar a +Politologia el enlace y un breve resumen; +Politologia se encarga de difundirlo.

origen visitantes web +Politologia
Ubicación de los visitantes (Fuente: SocialBro.com)

La comunidad +politológica crece

En los últimos meses, la web ha crecido en contenidos y el blog ha ampliado los mecanismos de difusión para politólogos y sociólogos. Gracias a la colaboración de una compañera -que prefiere permanecer en el anonimato, pero que merece todo nuestra gratitud-, hemos recogido los principales Congresos para politólogos.

Además, hemos creado una sección de enlaces de Transparencia y Open Government, en constante ampliación, para que los interesados en esta materia en boga, puedan acceder en un solo clic a los portales más importantes en la materia.


Seguimos creciendo gracias a ti, que haces +Politologia


7.24.2013

+Politologia en el número 17 de la Revista MasPoderLocal

Estamos muy contentos de anunciar que el Número 17 de la Revista Mas Poder Local contiene una página entera y a todo color sobre +Politologia. Como sabéis, Mas Poder Local se encuentra indexada en +Politologia desde el primer día, y la podéis encontrar accediendo a la sección Revistas.

Queremos agradecer a los responsables de la Revista por su 'savoir faire' y estamos convencidos de que se abrirán nuevas formas de colaboración. 


Además, en este último número cuentan con interesantes colaboraciones de amigos de +Politologia, como Antoni Gutiérrez-Rubí, Jorge Guerrero, Diana Rubio y Mar Vázquez. Puedes leerlos a continuación:



6.22.2013

Los Politólogos todavía no contamos con un día oficial que conmemore nuestra profesión. En aquellos países que sí cuentan con un día propio para la figura del Politólogo, las fechas son muy diferentes: así el 23 de septiembre se celebra en Argentina, en Colombia es el 12 de noviembre, y en México se trata de institucionalizar el 21 de marzo.

En España no existe un día oficial, y es por ello que después de mucho buscar en la Red, decidimos conmemorar el Día del Politólogo el 22 de junio, coincidiendo con Santo Tomás Moro, patrón de los gobernantes y los políticos, y que algunos señalan como patrón de los politólogos.

Sirva esta celebración para destacar que la profesión de la Politología merece un día conmemorativo


Tomas Moro Politólogos Patrón



6.08.2013

Por su interés recogemos la entrevista que nuestro director, Eli Gallardo, realizó al Profesor Jorge Urdánoz en diciembre de 2012. La representación es el tema principal, en torno al cual gira toda la entrevista.

Estamos preparando nuevas entrevistas con expertos y profesores universitarios, así que esperamos vuestras sugerencias y comentarios.

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Jorge Urdánoz (Pamplona, 1971), es profesor de Filosofía del Derecho en la Universidad Oberta de Catalunya. Sus líneas de investigación principales son los sistemas electorales y los sistemas de representación electoral. Su tesis “Un nuevo marco conceptual para el análisis electoral” (ver) es una fuente de referencias y conceptos muy detallada y amplia. Tiene publicados dos libros y varios artículos en revistas especializadas. Colabora habitualmente con artículos de opinión en varios diarios de referencia, entre ellos El País.

Encantado de conocerte, Jorge. Como especialista en sistemas electorales y en mecanismos de representación, ¿cómo entiendes tú la circunscripción, más allá de definiciones académicas?

Bueno, las circunscripciones las entiendo como lo que realmente fueron en su origen y continúan siendo hoy: instrumentos cuya única función es manipular el sistema electoral y otorgar a los dos grandes partidos una sobrerrepresentación que los ciudadanos no les otorgan.
Las circunscripciones provinciales carecen del más mínimo sentido representativo. Nadie vota para el Congreso de los Diputados pensando en el interés de su provincia. Que sean la circunscripción para el Congreso resulta sencillamente demencial. Que además lo sean también para el Senado… en fin, no hay adjetivos. 

Como «piedra de toque de la representación», el sistema electoral es fundamental para “traducir” las preferencias de la ciudadanía. En tu artículo de 2004, “Un nuevo sistema electoral” (ver) has defendido un nuevo sistema para España, con aportaciones tan interesantes como representar los votos blancos, que son votos válidos pero no a candidaturas. ¿Podrías resumirnos los principales puntos de ese «Sistema de Representación Absoluta»?

Lo resumo encantado, pero dejando claro que no lo defiendo para España. Como digo en el artículo, solo pretendo abrir un debate, nada más.
El sistema de Representación Absoluta (RA) es un sistema totalmente proporcional en el que se vota a listas de partido. Cada partido recibe una proporción de escaños igual a la de votos. Pero incluye dos novedades. Primera: las proporciones se calculan con respecto a todos los electores con derecho a voto, no con respecto a los votos válidos. ¿Qué hacemos entonces con el porcentaje de abstenciones y votos nulos? Los computamos como votos al partido más votado. Segunda: los votos en blanco se representan proporcionalmente mediante escaños vacíos.
Se consigue:
1.- Que el voto sea igual;
2.- Que la proporcionalidad con respecto a los electores (no con respecto a los votantes) sea perfecta;
3.- Incrementar la participación (es de esperar que la gente no se abstenga igual que ahora si sabe o prevé a qué partido concreto va a ir su voto: con el RA abstenerse es votar… por eso es imprescindible lo de los votos en blanco: es la única manera de no dar tu voto a nadie)
4.- Facilitar la gobernabilidad


Las Cámaras autonómicas han reproducido el sistema D’Hondt para la representación política, pese a las diferencias demográficas y políticas entre ellas. ¿Qué opinas de que se implantase un «Sistema de Representación Absoluta» a nivel autonómico?

Creo que es un error hablar de “el sistema D´Hondt”. D’Hondt no es un sistema sino una fórmula para transformar proporciones de votos en proporciones de escaños. Con respecto a los sistemas electorales autonómicos,  hay un criterio democrático obvio y elemental que debería estar garantizado judicialmente, pero que sin embargo todo el mundo parece ignorar: el voto igual. El sistema de Representación Absoluta lo garantiza, y en ese sentido lo prefiero a cualquier otro sistema autonómico que vulnere la igualdad de voto, y hay unos cuantos.
Lo que no tengo claro es qué prefiero: el sistema de Representación Absoluta o el “Holandés” o “proporcional puro”. Como no lo tengo claro, y como son cuestiones que considero interesantes, planteé un debate en mi artículo de 2004. Hasta donde sé, este blog y esta entrevista son la primera respuesta que recibo.

En tu propuesta de sistema electoral, vimos que se favorece tanto la proporcionalidad como la gobernabilidad. En el caso que se mantuviera un sistema con desproporcionalidades como el actual, ¿qué opinas acerca de las coaliciones de gobierno? ¿Crees que sería necesario una segunda vuelta para legitimarlas, o que forma parte de la autonomía partidista?

Aquí hay varias cuestiones que creo que hay que distinguir. En un sistema proporcional, sea el holandés o sea el RA, las coaliciones de partidos no es que sean legítimas, es que son la única manera que existe de hacer que gobierne la mayoría, porque sólo una coalición de partidos a los que ha votado más del 50% de los votantes pueden alegar tener una mayoría de votos detrás.
En sistemas con desproporciones, es muy probable que los partidos con mayoría parlamentaria no tengan realmente una mayoría de votos detrás. Es decir: gobierna una minoría, que es lo que habitualmente pasa en los sistemas que, sin embargo, suelen catalogarse como “sistemas mayoritarios”. Es el mundo al revés, en efecto. ¿Por qué? Porque la Ciencia Política es en muchas ocasiones mucho más “política” que “ciencia”.
Usar una segunda vuelta para legitimar una coalición no me parece una buena idea. Sería una especie de referéndum sobre el gobierno… algo muy disfuncional. Mejor exigir (1) voto igual y (2) que todo gobierno tenga una mayoría de votos detrás, y si es en coalición, pues perfecto: es lo que la mayoría quiere. Solo conozco un nombre para cualquier cosa que no sea eso:  que gobierne una minoría.


Para terminar me gustaría saber qué líneas de investigación sigues actualmente y si tienes previstos nuevos artículos en revistas especializadas o publicaciones en libros para el año que viene.
Estoy escribiendo un libro, un ensayo sobre cuestiones representativas.
La primera parte es un “Taller de Manipulación Electoral”. Estoy harto de ver cómo los partidos en el poder manipulan a la gente mediante los sistemas electorales, así que he pensado que lo mejor es enseñar directamente a la gente cómo se manipulan los sistemas electorales. Qué teclas hay que tocar y qué tornillos hay que apretar para que tu partido se vea beneficiado. El objetivo es, claro, que a la gente ya no la puedan manipular. Si no quieres que te manipule el escriba, tienes que aprender a leer. El viejo y eficaz remedio para casi todo: ilustración.  
La segunda parte es una propuesta para España, cuyo sistema electoral – manipulado hasta la médula por los hombres del tradofranquismo en 1976 y mantenido por aquellos actores a quienes beneficia: PP y PSOE– es una pesadilla institucional para el desarrollo del país, para su coordinación  territorial, para el ideal democrático y en general para todos los españoles, empezando por los propios votantes del PP y del PSOE. Como es sabido, para cambiarlo de veras – sin parches ridículos e inútiles - hay que cambiar la Constitución, de la que doy por hecho que somos los dueños, no los súbditos. Una idea poco menos que revolucionaria en este país, pero elemental en cualquier democracia mínimamente madura. El abc de la democracia: la Constitución es nuestra, no al revés.


Muchísimas gracias por tus respuestas y por la claridad de tu exposición. Quienes te leemos desde hace tiempo seguiremos atentos a tus publicaciones, y te deseamos mucha suerte.




5.18.2013


Desde +Politología nos complace presentaros la nueva sección de +Blog, que recibe el nombre de «Lecturas políticas». Conscientes de que nuestra profesión requiere de una actualización constante, las lecturas son una parte fundamental y qué mejor que compartirlas en un foro como este.
Es por ello que vamos a abrir la página a vuestras lecturas relacionadas con la Politología y la Sociología, y os invitamos a que enviéis un breve resumen, crítica o recomendación de los libros que más os gusten, los últimos que hayáis leído o aquellos que estéis leyendo actualmente. Junto a vuestra reseña y nombre, nosotros adjuntaremos la imagen de la portada del libro. No existe una lista cerrada, ni cada libro es excluyente, es decir, que pueden repetirse reseñas de libros (por ejemplo, Teoría de la Democracia de Sartori puede estar recomendada por tres personas diferentes).
Para enviar vuestra lectura política solo tenéis que escribir a info@maspolitologia.com o a través del formulario:
Nombre y apellidos.
Cuenta de Twitter (si tienes).
Título y nombre del autor. Editorial y año de edición.
Reseña/Comentario/Crítica. Máximo de 300 palabras.

Podrán enviarse hasta 5 libros por persona y mes.
Esperamos que este espacio sirva para conocer nuevos autores, teorías y que podamos comentarlos en este blog o en las redes sociales. 


5.06.2013

Uno de los objetivos de +Politología es favorecer el trabajo de politólogos y sociólogos, y darle visibilidad, acercarlo al público general y al especializado. Es por ello que pusimos en marcha el Directorio de Blogs, o +Papers, con la intención de difundir las publicaciones y trabajos de estos científicos sociales.
Conscientes de la difícil situación laboral de España, creímos necesario aportar la visión de politólogos y sociólogos que han tenido que marcharse fuera para trabajar, y conocer sus trayectorias, su experiencia y sus recomendaciones a los jóvenes que dentro de unos meses, o unos años, pueden verse en la misma situación.
Os presentamos a Alberto Aznar y a Laura Zorrilla:
Alberto Aznar (A.A.) se licenció en Ciencias Políticas y de la Administración en la Universitat de València (julio de 2012), y actualmente trabaja en Berlín, Alemania.
Laura Zorrilla (L.Z.) es socióloga por la Universidad Complutense de Madrid desde 2007, y ha emigrado dos veces: una al Reino Unido (2007-2010) y otra a Italia (2012).


1. ¿Realizasteis prácticas formativas durante la carrera? ¿Creéis que son necesarias?
A.A.: Sí, he tenido la oportunidad de realizar prácticas formativas durante la universidad, pero no como formación obligatoria. Que los planes de estudios de licenciatura no incluyeran la realización obligatoria, sino meramente opcional, de prácticas externas ha sido un error que está siendo solventado con los nuevos grados, que contemplan como parte de la formación básica de todo estudiante el pasar unos meses en contacto con el ‘mundo real’.
L.Z.: Durante la carrera no realicé prácticas formativas, pero sí creo que sean muy necesarias, incluso desde el primer curso.

2. ¿Habéis realizado algún tipo de investigación, o pensáis en investigar en Politología o Sociología?
A.A.: Sí, tuve la inmensa suerte de participar y presentar pequeñas investigaciones en congresos universitarios como el INCIJUP - Encuentro de Jóvenes Investigadores en Ciencias Jurídicas y Políticas (www.incijup.com), de la Universidad de  Salamanca, en el que recomiendo encarecidamente participar por ser una experiencia increíble, haber aprendido mucho y además hacerlo en un ambiente con otros ‘jóvenes investigadores’ excelente. Principalmente me interesan, por una parte, la calidad de la democracia, sus instituciones y sus actores y, por otra parte, como esos diferentes actores, partidos, ciudadanos y otras organizaciones actúan y se relacionan entre sí y que ahora denominamos, con el término que tan de moda se ha puesto, ‘comunicación política’.
L.Z.: He participado en distintos proyectos de investigación, sobre todo centrado en temas de inmigración, asilo y remesas, en España y en el Reino Unido, como asistente de investigación.

3. Antes de marcharos de España, ¿trabajasteis alguna vez en sectores relacionados con vuestra titulación? Si es así, ¿en qué sectores y con qué funciones?
A.A.: Tuve la oportunidad de ser becario en la sección de política financiera y presupuestos del Ayuntamiento de Valencia, donde trabajamos en temas relacionados con la hacienda pública, ordenanzas fiscales, impuestos locales, etc.
L.Z.: Me empezó a interesar el tema de la inmigración e intenté adquirir un poco de experiencia como investigadora en este campo haciendo trabajo de campo para investigaciones sobre remesas y el impacto de la inmigración en la educación.

4. ¿Cómo valoran vuestra titulación en el país donde trabajáis? ¿Es una carrera conocida?
A.A.: Sí, mi opinión general es que tanto la Ciencia Política como la Sociología disfrutan tanto de una mayor consideración laboral como de un mayor reconocimiento social en Alemania que en España. Esto no quiere decir, por supuesto, que por estas tierras del norte todo politólogo o sociólogo tenga trabajo y se haga rico, pues aunque parece que ahora los que se van de España a trabajar al extranjero se van a hacer rico, las cosas fuera tampoco son coser y cantar. Desde luego, me identifico más con la idea del ‘exiliado económico’ que con esa otra de la ‘movilidad exterior’.
L.Z.: En el Reino Unido la titulación de Sociología tiene mucho reconocimiento, ya que muchas leyes, planes de actuación y en general policies se basan en recogida de datos y en investigaciones. Aparte de esto, hay una gran industria del tercer sector que realiza investigaciones independientes sobre temas sociales. Si es muy conocida y muchas universidades la ofertan.
En Italia, sin embargo, me atrevería a decir que la Sociología esta relegada a un segundo plano por detrás de las Ciencias Políticas, que aquí tienen mucha tradición. Hay menos facultades que la oferten.

5. ¿Conocéis algún colectivo (asociación, federación) de politólogos y/o sociólogos en vuestro país de destino? ¿Son valorados socialmente?
A.A.: Sí, aquí en Alemania existe la Deutsche Vereinigung für Politische Wissenschaft (https://www.dvpw.de, está en inglés, por si queréis echar un vistazo), asociación de ciencia política equivalente a la AECPA española. Creo que es más valorada que en España, también teniendo en cuenta que como sabemos en Alemania y otros países de nuestro en entorno la valoración general y pertenencia a asociaciones es mayor que en España.
L.Z.: No conozco personalmente las asociaciones de sociólogos de aquí, aunque sé que las hay.

6. Para terminar, nos gustaría saber qué consejos daríais a un estudiante de Ciencias Políticas o de Sociología desde vuestra experiencia.
A.A.: Como puntos prácticos, como sabemos son fundamentales los idiomas, así como ya desde el comienzo de la universidad ir adquiriendo experiencia laboral. Pero también es absolutamente necesario adquirir una buena expresión tanto oral como escrita, siendo ésta una habilidad a la que no se le presta la necesaria atención y valoración, pues si bien sí existen diferentes cursos y actividades en las universidades españolas sobre debate y oratoria, aprender a expresarse escrita y oralmente debería ser materia obligada de todo politólogo y sociólogo. Y, como puntos más utópicos, creo que un politólogo siempre debe de actuar con honestidad intelectual –para no quedarse con las conclusiones que refuerzan las propias posiciones-, con trabajo duro –para que los análisis sean lo más completos posibles al ser una materia compleja- y con pasión por lo que hace, pues la verdad es que cuánto uno más lee y reflexiona sobre la res publica, más se da cuenta de que las soluciones mágicas no existen, y que la política es un permanente conflicto de intereses donde cada parte tiene sus razones y sus emociones.
L.Z.: En general, les diría que presten más atención a la nota media del expediente académico de la que le presté yo, ya que te abre la puerta a muchas becas para estudiar en el extranjero. Si no dominan el inglés, que intenten pasar un tiempo fuera en un país de habla inglesa no solo para perfeccionarlo, sino para dominarlo.
En caso de que quieran quedarse en España, recomiendo que se colegien. A mí me ayudó mucho colegiarme para conocer muchas iniciativas, grupos de trabajo, y oportunidades de empleo dentro de España.
También, les aconsejaría vigilar a través de las redes sociales todos los debates que tienen lugar sobre muchísimos temas. Y no pensar automáticamente que la única salida a Sociología son los estudios de mercado, en realidad se pueden hacer muchas cosas con esta carrera, aunque a veces cueste un poco abrirse camino.

Desde +Politología agradecemos la colaboración de Alberto y de Laura, y les deseamos mucha suerte en su andadura.



3.21.2013



Información Vs Espectáculo,
por Diana Rubio, Licenciada en Ciencias Políticas y de la Administración.

 El infoentretenimiento, la tendencia a la hibridación entre la información y el espectáculo, la rotura de ésa barrera entre dos ámbitos, vuelve a relucir dentro de la actualidad política internacional; el fallecimiento del presidente venezolano Hugo Chávez, un líder ejemplo de ésta corriente comunicativa en política.
El presidente de Venezuela, era un experto en mezclar éstos dos términos, eso si, a su manera, donde a veces conseguía su propósito y otras veces creaba controversias internacionales.
Es curioso que ésta estrategia de comunicación utilizada por Chávez, da sus primeros pasos en EEUU. Políticos como Eisenhower o Kennedy ayudan a contextualizar este modelo. Reagan fue calificado como un presidente que actuaba y un actor como presidente, personaje político en el cual se mezclaban los dos ámbitos dentro de la política, información y espectáculo.
Si desgranamos las características del infoentretenimiento en su persona, dentro de la rigidez de sus mandatos, encontramos las siguientes evidencias:
1.      Alarmismo: el magnificar situaciones con consecuencias negativas donde se vea al enemigo como una amenaza real para la población, mediante la realización de un discurso es una de las estrategias que Hugo Chávez ha sabido realizar a la perfección. La utilización del dramatismo junto con una actitud provocadora con el objetivo de emocionar al público, ha sido desempeñado a la perfección por el fallecido presidente. Ésta manera de actuar crea entre los ciudadanos sensaciones de pánico y miedo y consigue convertir en héroe al responsable de proteger de esos enemigos a la población.
2.      Personalización del líder: La relevancia que toma el político como individuo, el enseñar su faceta como ciudadano, no como político también ha sido visible en éste representante latinoamericano. El hacer pública su vida privada tal y como muestra la última foto publicada de él, donde enseñaba a través de los medios una imagen familiar en la cual leía un periódico en compañía de sus hijas, es un recurso enmarcado dentro de ésta estrategia comunicativa, que consigue humanizar al político y crear empatía o antipatía con la población.
3.      Lenguaje bélico: La utilización del discurso político para alentar a la población como manera de conseguir un fin determinado de ella también tiene puntos característicos del infoentretenimiento. No sólo la utilización de un determinado vocabulario en el discurso, también el cómo se dice. El empleo de tonos inflexibles y exaltadas y palabras que animan a la movilización, dan como resultado un lenguaje similar al bélico, la arenga militar que enardece los ánimos de quienes lo escuchan.
El encontrar un líder venezolano que sepa manejar tan bien esta estrategia de comunicación, será difícil.
El futuro de Venezuela se encuentra en el aire, veremos en los próximos días como se desarrollan los procesos electorales que marcan las leyes de éste país. Sea cual sea el resultado, formará parte de otro de los capítulos de la historia política internacional, unido al carácter de la revolución chavista y de su fallecido presidente, héroe para unos y villano para otros.


Obituario de un matador de demonios,
por Alberto Gil Fernández, Licenciado en CC. Políticas y Sociología.

            Cuando en este país los demonios andan sueltos y campando a sus anchas, al otro lado del charco despiden en loor de multitudes a Hugo Chávez Frías, carismático y controvertido líder de la revolución bolivariana en Venezuela, que tuvo el valor de enfrentarse a muchos de los demonios que, de la mano del imperialismo, se habían asentado en el cono sur americano. Esos demonios que denunció en su momento Eduardo Galeano en “Las venas abiertas de América Latina”, y que provocaron que países inmensamente ricos en recursos fueran el hogar de pueblos pobres y desasistidos, víctimas de una situación de dependencia sostenida por unas elites políticas vendidas a los intereses de las potencias occidentales, y sobre todo del amo yanki, que siempre  consideró al sur como su patio trasero, su despensa y su coto privado, del que podía servirse a su entera conveniencia.
            Desde su independencia, ya fuese mediante los más turbios dictadores, o con remedos de presidencias “democráticas”, pero podridas hasta la náusea, la mayor parte de la riqueza de las naciones americanas había sido expoliada sistemáticamente para sostener el desarrollo del primer mundo, eternizando su condición de países “en vías de desarrollo”; un desarrollo que nunca terminaba de despegar, acuciado por relaciones comerciales desequilibradas e injustas, por sistemas políticos y sociales en los que la corrupción era seña de identidad y penetraba todos los estamentos, y más recientemente por las presiones de una deuda ilegítima vinculada a las condiciones leoninas impuestas por los organismos financieros transnacionales.
            Hasta hace bien poco, la soberanía nacional en Latinoamérica, si entendemos como tal la capacidad de las naciones para decidir sobre qué camino desean tomar sin imposiciones ajenas, era poco más que un deseo utópico. Con sola excepción de Cuba, el largo brazo de la política exterior estadounidense había logrado poner y quitar gobiernos, ya fuera mediante el dinero como por oscuras operaciones encubiertas, civiles y militares,  de sus servicios secretos para garantizar sus intereses (recuérdese a F.D. Roosevelt refiriéndose a Somoza diciendo que “puede que sea un hijoputa, pero es nuestro hijoputa”). Pero últimamente, la victoria de las opciones de la izquierda parece estar consiguiendo que cambie el panorama. Con diferentes grados y estilos, líderes como Lula, Evo Morales, Correa, Múgica, y, singularmente, Hugo Chávez, se dispusieron a tomar al fin las riendas del desarrollo de sus países, esto es, recuperar la soberanía nacional, para promover al fin el desarrollo de los pueblos y no solo de sus clases privilegiadas.
            En el caso venezolano, la firmeza con la que Chávez puso en marcha su proyecto bolivariano, enfrentándose a los intereses de las multinacionales occidentales, le granjeó inmediatamente  la animadversión del poder político y económico internacional, que lanzó una desproporcionada ofensiva mediática para presentarle como un dictador golpista y populista y, por ello, como un serio peligro para la estabilidad de la zona. Es cierto que a ello ayudaba la personalidad tumultuosa e histriónica del propio personaje, pero no lo es menos que pese a este carácter (o a lo mejor por ello) supo conectar con las clases populares venezolanas, que por primera vez encontraron un líder que hablaba como ellos mismos, y que, tras hacerse con el control público del valioso recurso petrolero, invirtió en los desheredados, que empezaron a disfrutar de recursos inéditos como la educación, la vivienda o la sanidad. Por más que se quiera denostar al personaje, y pese a que subsisten serios problemas como la seguridad ciudadana, las cifras que refrendan los resultados de su gestión son contundentes: la reducción de la pobreza del 43,9% en 1998 al 24,5% en 2011, y especialmente de la pobreza extrema, la generalización de la alfabetización y la puesta en marcha de programas sanitarios, o la fuerte reducción de las desigualdades (el índice de Gini pasó del 0,486 al 0,390 en el mismo periodo) tienen suficiente entidad como para sobreponerse a la crítica de las formas o los mensajes.
            Pero, con todo, los resultados del liderazgo de Hugo Chévez no se limitan al ámbito venezolano. Su fuerte personalidad le ha permitido liderar iniciativas regionales como el ALBA, y exportar elementos de la propuesta bolivariana que han sido asumidos con interés por los gobiernos de progreso de los países del entorno, lo que ha convertido a Latinoamérica en el área más dinámica del globo en lo que se refiere a desarrollo social y económico. Justo cuando en un arranque de dignidad nacional, sus gobiernos han abjurado de las recetas del FMI y el BM (las mismas que mantienen a Europa en una crisis sistémica que mantiene congeladas sus economías nacionales), para controlar desde el poder público los sectores estratégicos de la economía, poner freno expeditivamente a las prácticas depredatorias de las multinacionales y promover políticas verdaderamente redistributivas, que alcancen a los eternos olvidados.
            Personalmente suelo recelar de los hiperliderazgos, porque creo en las bondades de la horizontalidad y en el conocimiento y el poder compartidos. Pero, hoy por hoy, tanto la carencia como la sobreabundancia de información, no suelen permitir la reflexión necesaria (y menos al nivel de poblaciones enteras) para tomar las mejores decisiones, y todavía la opinión pública es voluble e imprecisa, necesitada de intérpretes de la realidad que señalen el camino a seguir. Para Venezuela, y para el mundo, el excesivo comandante ha resultado ser un visionario capaz de infundir esperanza a los parias de su tierra. Y, como alguno ya ha advertido, se equivocan los que piensan que su prematura muerte deja tocado su proyecto y que, a través de la oposición,  terminará retornando el orden imperial de las multinacionales. Ciertos líderes, como el Cid o como Gandhi, ganan sus más grandes batallas después de muertos, cuando se convierten en mitos, en referencias icónicas de lo que significa luchar por unas ideas en vez de por acumular dinero. Hugo Chávez seguirá siendo recordado cuando de los libros de historia se hayan borrado, por irrelevantes, Rajoyes y Mérkeles, o Aznares y Berlusconis.

Publicado originalmente en el blog “Este país de todos los demonios” el 07/03/2013




El bolivarianismo y la aparición de la Patria Grande,
por Santiago Fernández Fernández-Caballero, Licenciado en Ciencias Políticas y de la Administración y Máster en Ciencia Política.

Recordaba Eduardo Galeano, durante una conferencia de prensa celebrada en Italia en 2004, la frase de un anónimo encuestado venezolano: “Yo no quiero que Chávez se vaya porque no quiero volver a ser invisible1. La dialéctica en torno a la visibilidad/invisibilidad dentro del espacio sociopolítico se traduce en la lucha por el acceso a la ciudadanía, siendo equiparable a la dialéctica inclusión/exclusión inherente a la idea de contrato social de la modernidad y mostrándose, sin lugar a dudas, como un elemento determinante a la hora de realizar un análisis politológico del proceso político bolivariano en estos últimos quince años –entendiendo por politología el estudio de lo político y lo político, como aquella parte de lo social encargada de la definición y articulación de las metas colectivas de obligado cumplimiento–.
Por encima de otras consideraciones igualmente relevantes como los logros socioeconómicos que han permitido a dicho proceso acumular legitimidad, las dimensiones mediáticas de la figura de Hugo Chávez como líder carismático, el creciente papel geopolítico que ha permitido a Venezuela encabezar procesos de integración regional a través de organizaciones como la CEPALla ALBA o la UNASUR (a partir de una posición energética privilegiada que otorga un relevante espacio al socialismo bolivariano para la difusión de un discurso libertador y antiimperialista), las relaciones diplomáticas que parecen desafiar los ejes de cooperación convencionales del llamado “mundo libre” o el reconocimiento gradual que ha ido obteniendo tanto el movimiento como su líder por parte de los sectores progresistas de Occidente e instituciones netamente liberales (pocos imaginaban en 2000 que casi toda Europa terminaría avalando los procesos electorales venezolanos diez años después2), el acceso de millones de venezolanos a la ciudadanía de facto durante estos años representa uno de los fenómenos más importantes de la historia política reciente, especialmente si se ubica dentro de un contexto cosmovisual como el posmoderno, donde peligran las ideas de la voluntad general y del bien común sobre las que se asienta un régimen general de valores que hasta hoy ha sido el garante último de los horizontes de expectativas del ciudadano moderno3.
Ciertamente, y a pesar de las contradicciones inherentes a todo proceso político, uno de los resultados más exitosos de las políticas públicas articuladas desde la revolución bolivariana ha sido la mejora de la calidad de vida de millones de personas no sólo a nivel socioeconómico, sino también en lo que respecta a la toma de conciencia política y social como ciudadano –recordemos los derechos históricos de la ciudadanía contemporánea planteados por Thomas H. Marshall: civiles, políticos y sociales4–. Según la Comisión Económica para América Latina (CEPAL)5, el porcentaje de población venezolana en situación de pobreza ha pasado del 49,4% (1999) al 27,1% (2009), un descenso sin precedentes en el país. De acuerdo con la UNESCO Institute for Statistics6, las tasas de alfabetización y especialmente de escolarización también han aumentado considerablemente: de un 45% (1999) a un 73% (2010) en educación elemental y de un 57% (1999) a un 83% (2010) en secundaria. Como consecuencia de estas y otras tendencias al alza –como la tasa de ingresos universitarios o la reducción de la desigualdad–, el índice de desarrollo humano (IDH) ha crecido, según el informe del UN Development Programme7, del 0.662 (2000) al 0.748 (2012), sólo superado en Sudamérica por Argentina, Chile y Uruguay. Por su parte, los datos electorales reflejan que el acceso real a la ciudadanía también genera una mayor implicación con respecto a los asuntos públicos. Como muestran los datos del Consejo Nacional Electoral, la tasa de participación en elecciones presidenciales ha pasado del 66,5% (1998)8 al 80,5% (2012)9, una cifra que hace tiempo que no se da en ningún país socioeconómicamente desarrollado (salvo en los que es obligatorio votar, como Bélgica o Luxemburgo). Naturalmente, un Estado con semejantes reservas energéticas tiene mayores posibilidades de conseguir tales resultados socioeconómicos, pero por la misma razón esta tendencia podía haber comenzado con anterioridad, especialmente si se tiene en cuenta que durante gran parte del siglo XX Venezuela fue el primer exportador mundial de petróleo. Pero no fue así, quedando claro que la diferencia radica en la irrupción de una nueva voluntad política de grandes sectores del pueblo venezolano que, hasta hace poco más de una década, no habían contado con los medios ni estructuras necesarios para ser reconocidos como ciudadanos de facto y así poder participar como tales de los asuntos públicos.
Por esta razón, no parece del todo honesto plantear la irrupción del socialismo bolivariano en el espectro político venezolano como el principal motor de la polarización existente, habida cuenta de que durante muchas décadas hubo (y sigue habiendo) millones de personas sin acceso a los plenos derechos y deberes propios de todo ciudadano. El resultado más lógico, apropósito del eterno debate entre democracia representativa y participativa, es que quienes ahora comienzan a participar desean ser representados por quienes les han empoderado y ayudado a hacerlo, una suerte de correlación entre actores, programas, estructuras y clases sociales cuya expresión más simbólica posiblemente se ubique en aquella frase electoral de Hugo Chávez: “Los que quieran patria, vengan conmigo”. Son muchos los datos que parecen indicar que la patria grande ha agrandado la sociedad civil venezolana cuantitativa y cualitativamente. El presente indica que debe seguirse incidiendo en dicho crecimiento, y el mejor medio es continuar luchando contra sus miserias y contradicciones pasadas y presentes.

_
2 Declaración de la Alta Representante, en nombre de la Unión Europea, sobre las elecciones en la República Bolivariana de Venezuela (28 de septiembre de 2010) http://www.consilium.europa.eu/uedocs/cms_data/docs/pressdata/es/cfsp/116789.pdf
3 Santos, Boaventura de Sousa; Reinventar la democracia, reinventar el Estado; Sequitur, Madrid, 2008 (págs. 9-11)
4 Marshall, Thomas Humphrey; “Ciudadanía y clase social” (conferencia en Cambridge, 1949) , en Revista Española de Investigaciones Sociológicas nº 79, 1997 (págs. 297-344)
5 “Población en situación de pobreza e indigencia por área geográfica” (CEPAL) http://websie.eclac.cl/sisgen/ConsultaIntegrada.asp?IdAplicacion=1&idTema=362&idIndicador=182&idioma=e
7 Indicadores internacionales sobre desarrollo humano (UN Development Programme) http://hdrstats.undp.org/es/indicadores/103106.html


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